La calidad del aire que respiramos es un aspecto fundamental para vivir una vida adecuada, y para poder sentirse bien y saludable.
Sin embargo, si bien la calidad del aire exterior es algo que siempre notamos, y cualquier signo de mala calidad del aire exterior suele suscitar preocupación tan pronto como se perciben estos signos, no era lo mismo tratarse de la calidad del aire en interiores, que no siempre se ha tenido en cuenta para el bienestar general. Esto ha cambiado desde la pandemia en 2020, y ahora está mucho más presente.
Hay casos en que la mala calidad del aire en el interior es evidente, sobre todo debido a factores como los estornudos y ataques de tos, los olores químicos, u otros tipos de olores que no son a los que estamos acostumbrados. Pero hasta cuándo no se nota en el día a día, sigue siendo importante para prevenir riesgos para la salud, como se comprobó a raíz de la pandemia.
Nunca nos gustaría estar expuestos a un aire contaminado, lo notemos o no. Pero esta problemática puede ser especialmente complicada en el ambiente de trabajo, donde tú y tu equipo respiráis el mismo aire durante muchas horas, por lo que es primordial concienciar sobre la importancia de garantizar una buena calidad del aire en el trabajo.
La Calidad del Aire Interior en la Oficina
Uno de los problemas al considerar la calidad del aire en el ambiente de trabajo es que no siempre es tan fácil saber cuándo el aire que se respira no es el adecuado. Excepto cuando hay señales muy claras.
Las oficinas y los ambientes de trabajo son algunos de los espacios interiores más propensos a tener una calidad de aire pobre o subóptima debido a sus necesidades, que a menudo involucran a más de diez personas juntas, a menudo en edificios antiguos o no muy mantenidos.
Cuando el aire respirado durante muchas horas por los trabajadores no es bueno, la productividad y la concentración de los trabajadores disminuyen considerablemente. Ante esta situación, es del interés de la empresa tener una mejor calidad del aire para que los trabajadores puedan estar más cómodos y ser más productivos. Y es del interés del empleado para encontrarse mejor.
Asegurarse de que el aire respirado en una oficina es tan bueno como debería no es sólo una tarea para los empleadores, gerentes o propietarios del edificio. Los empleados y los miembros de una organización, como ocupantes de un edificio o espacio interior, deben ser parte de la solución y pueden pedir que se realicen periódicamente pruebas de calidad del aire en interiores.
Hay muchas maneras de determinar la calidad del aire en el ambiente de trabajo. Para alcanzar las mejores condiciones, se debe determinar la concentración de dióxido de carbono (CO2) y la temperatura y humedad del aire, así como los síntomas repetidos entre los trabajadores.
¿Cómo Afecta la Mala Calidad del Aire en Interiores a los Empleados?
Hay muchos factores que pueden mejorar o perjudicar la comodidad y el bienestar en el entorno laboral, afectando a la productividad y el bienestar de los empleados.
En particular, lo bueno o malo que es el aire en el ambiente de trabajo es un aspecto que puede afectar el desempeño de los empleados en diversos grados, y en algunos casos, puede ser la causa principal de una productividad negativa en la oficina.
También puede ser la causa de la transmisión de virus, desde un común resfriado a otros más severos.
Pero no sólo esto, una mala calidad del aire en el interior puede hacer que el ambiente esté más cargado, y que los trabajadores se sientan más cansados, en algunos casos incluso mareados o que les produzca dolor de cabeza, lo que convierte una situación como una reunión regular en una tarea más complicada de lo que debería ser. Aquí van algunos síntomas que también experimentamos debido a la mala calidad del aire: estornudos, secreción nasal y tos, entre otros.
Los malos olores también pueden reducir la calidad del ambiente de trabajo, ya que los trabajadores pueden querer evitar realizar ciertas tareas que impliquen ir a aquellos lugares donde la concentración de estos olores desagradables sería mayor, haciendo muy difícil que alguien se concentre en el trabajo.
En general, ya sean alérgenos o gases que pueden ser perjudiciales para la salud, y aunque las consecuencias no se perciban fácilmente, es indispensable asegurarse de prevenir cualquier riesgo de problemas de salud para tus empleados.
Causas de la Mala Calidad del Aire Interior
La calidad del aire en interiores es uno de esos aspectos que puede ser causado por varias variables, a veces más de una al mismo tiempo, lo que podría dificultar la detección de las causas del problema, aunque las consecuencias se manifiesten entre los afectados.
Una de las principales causas de la reducción de la calidad del aire en el interior son los contaminantes que provienen del exterior (en inglés). Esta es una de las primeras causas que deben ser probadas cuando se sospecha una mala calidad del aire interior, aunque hay muchas maneras o razones por las que suciedad, virus o gases pueden contribuir a esa mala calidad del aire interior.
En primer lugar, las organizaciones o empresas pueden estar ubicadas en lugares donde los niveles de contaminación son altos, debido a las industrias cercanas. O estar en una ciudad donde los niveles de contaminación son altos, lo que facilita que estos agentes contaminantes lleguen a la oficina.
Los sistemas de refrigeración y calefacción son otro factor que podría estar causando que los contaminantes entren en el edificio. Esto se debe a elementos como la falta de mantenimiento de los conductos, o una instalación no óptima de estos sistemas, que son esenciales por sí mismos para garantizar el bienestar en el entorno de trabajo.
Hay muchos otros factores que pueden reducir la calidad del aire en el interior, empezando por los virus de la gripe, covid, etc. También el uso de productos químicos para la limpieza, el uso de plaguicidas en el caso de entornos de trabajo cuando estos productos son necesarios para la producción, e incluso el material de oficina, especialmente las impresoras y las fotocopiadoras.
En general, todo lo que afecte al bienestar de los empleados, y que pueda incluso tener un impacto negativo en su salud, debería ser objeto de atención y solución. Es fundamental comenzar con aquellos que están teniendo el mayor impacto negativo en los trabajadores o empleados.
¿Cómo Mejorar la Calidad del Aire en el Espacio de Trabajo?
Afortunadamente, hay varias acciones que se pueden realizar para empezar a mejorar la calidad del aire en el interior sin necesidad de considerar soluciones más extremas como el traslado de la oficina a un edificio diferente lo cual no es rentable, ni es factible para tu organización.
A continuación encontrarás los 9 consejos para mejorar la calidad del aire en tu espacio de trabajo.
- Se deben realizar varias pruebas en el edificio, ya sea si hay un caso evidente de mala calidad del aire, o si se desea asegurarse de que esto no es un problema en el ambiente de trabajo. Desde el flujo de aire hasta los niveles de humedad, la ventilación, los olores, las fugas, el agua estancada, los daños causados por el agua, el crecimiento de moho y más. La primera prueba que se suele realizar cuando se mide la calidad del aire interior es una prueba de dióxido de carbono o CO2. Si los resultados son bajos niveles de este gas, indica que hay necesidad de más aire exterior.
- Utiliza aire fresco siempre que sea posible. Si tu oficina tiene ventanas, ábrelas.
- Los sistemas de aire acondicionado y calefacción son algunos de los primeros factores a considerar cuando se trata de mejorar la calidad del aire interior, especialmente, realizando un mantenimiento periódico de sustitución de los conductos del sistema, para evitar que los contaminantes y las sustancias nocivas afecten al aire interior.
- Mantén los conductos de aire abiertos y desbloqueados y sustituye los filtros de aire con frecuencia.
- Mantén un nivel saludable de humedad en tu lugar de trabajo. Una humedad de entre el 30 y el 50% ayuda a mantener los ácaros del polvo, el moho y otros alérgenos bajo control. Utiliza deshumidificadores y acondicionadores de aire para controlar el nivel de humedad en tus instalaciones.
- Añade algunas plantas. Ayudan a mantener el aire limpio, ya que absorben dióxido de carbono. No son una solución única ya que las cantidades son pequeñas, pero ayudan y dan un ambiente más acogedor.
- Mantén tu oficina limpia utilizando productos respetuosos, suaves y no agresivos cuando sea posible.
- Otra forma menor, pero importante, de mejorar la calidad del aire, es buscar materiales poco contaminantes para el mobiliario y los accesorios de tu lugar de trabajo y asegurarte de elegir materiales que estén certificados por el Instituto Internacional de la Construcción de WELL (Estándar de Construcción WELL). Algunos accesorios están incluso hechos de pieles de patata pegadas con fécula de patata! Puedes obtener más información sobre el Estándar WELL y otras certificaciones de diseño sostenible, aquí.
- También te recomendamos que leas nuestro artículo sobre las Medidas para preparar tus edificios para su reapertura post COVID-19, donde te damos consejos detallados con información técnica.
Los empleados también son fundamentales a la hora de asegurar la buena calidad del aire en un espacio de trabajo, ya que son los que normalmente están más expuestos a ello, y pueden ser las mejores pruebas, por lo que es importante que comuniquen cualquier situación que esté afectando a su confort general.
Por último, pero no por ello menos importante, existen plataformas SaaS como Spacewell Energy (Dexma) que pueden proporcionarte datos en tiempo real sobre la calidad del aire de tu lugar de trabajo. Esto es especialmente importante para los puntos 1 y 5. A través dle software puedes medir y gestionar los datos de humedad, temperatura y partículas, entre otros. Con esta información en la mano, es mucho más fácil tomar medidas adecuadas, en vez de probar sin seguridad.
La funcionalidad Air Quality Monitor existe para ayudarte a mejorar la calidad del aire en tus instalaciones, enviándote recomendaciones a las que puedes acceder desde un dashboard. Puedes inspirarte con el caso de éxito de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). Y si quieres más sobre la Plataforma, puedes ver la vídeo demo aquí.