Los desafíos y objetivos para los arquitectos, diseñadores urbanos y propietarios de edificios ya no están relacionados con la construcción de los edificios más impresionantes y desafiantes en términos de altura y formas complejas. O por lo menos, no sin apuntar a la sostenibilidad del edificio, como en el caso de los edificios “NZEB”.
No es que no haya un deseo de crear edificios de aspecto moderno. Es que la arquitectura y el diseño urbano se enfrentan a la necesidad, y en algunos casos a la demanda, de que los edificios se construyan con el medio ambiente en sus fundamentos.
A medida que la población crece y hay menos espacio en las zonas urbanas para viviendas y otro tipo de construcciones, se hace aún más esencial que los edificios proporcionen espacios confortables a sus ocupantes, asegurándose al mismo tiempo de reducir el consumo de energía, aplicando optimizaciones o construyendo con la eficiencia energética en mente.
La sostenibilidad urbana y el papel de los edificios
Dado que muchas grandes ciudades de todo el mundo se enfrentan a graves problemas ambientales debido a la contaminación, a los largos desplazamientos y a otros problemas agravados por la falta de planificación urbana, ha aumentado la necesidad de crear nuevos espacios o de reacondicionar los existentes.
La sostenibilidad urbana o urbanismo sostenible, es un modelo de desarrollo de las ciudades en el que los edificios y las zonas urbanas se diseñan, planifican y construyen cumpliendo diferentes criterios que aseguran resultados de calidad a largo plazo en lo que respecta al consumo de energía, la calidad del aire, el consumo de recursos naturales, el transporte, etc.
El consumo de energía por sí solo es una preocupación y un objetivo importante de la sostenibilidad urbana, ya que alcanzar la eficiencia energética puede reducir en gran medida la emisión de gases de efecto invernadero, reducir los costes de la energía y mejorar la calidad de vida de los habitantes de una zona urbana.
Con este objetivo en mente, los edificios juegan un papel fundamental en la optimización del consumo de energía, ya que se trata de espacios compartidos por cientos o miles de personas diariamente.
Afortunadamente, los propietarios de los edificios son cada vez más conscientes de la importancia de un plan de gestión energética adecuado. De hecho, muchos de ellos ya están contratando a gestores de energía profesionales, adquiriendo sensores que alimentan con datos a un BMS y un SGE (Software de Gestión de la Energía) para permitir que el edificio se adapte y optimice para mejorar la eficiencia energética y la sostenibilidad.
La Plataforma DEXMA por ejemplo, proporciona indicadores potentes para evaluar el rendimiento energético de tus edificios a través de un seguimiento en profundidad, de análisis y recomendaciones de eficiencia personalizadas.
Hay muchos desafíos en cuanto a la eficiencia energética de los edificios, pero las tecnologías como el Aprendizaje Automático (Machine Learning) y disciplinas como la Data Science y el Big Data; así como una creciente sensibilización entre las personas en cuanto a las necesidades de nuestro planeta, pueden hacer que esto suceda.
Diseñar edificios con la Eficiencia Energética en mente
Podría ser tentador decir que es más fácil para los nuevos edificios utilizar la energía de manera más eficiente, ya que pueden ser diseñados con estas técnicas y consideraciones en mente. Sin embargo, todavía hay muchos aspectos que deben ser abordados para sacar el máximo provecho de las nuevas construcciones, y para mejorar el uso de la energía de los edificios existentes.
A continuación presentamos una lista de 6 Recomendaciones sobre Cómo Optimizar la Eficiencia Energética de tus Edificios:
1. En primer lugar, es más importante que nunca volver a las raíces de la arquitectura y comprar localmente en lo que se refiere a los materiales. De hecho, una de las principales ventajas de construir con materiales locales es la reducción en el consumo de combustible para transportar el material durante el proceso de construcción.
2. La ubicación del edificio es otro factor importante cuando se construye teniendo en cuenta la sostenibilidad urbana. Cuando se habla de la ubicación de un edificio, se trata tanto de sus coordenadas como de su orientación, ya que ambos son factores que pueden marcar una gran diferencia por sí mismos.
- Dónde construir es una cuestión esencial en la planificación urbana sostenible. Es común construir grandes y modernos edificios residenciales en áreas suburbanas; lo que hace aún más necesario que los habitantes hagan largos viajes, a menudo en sus propios coches, consumiendo más gas.
- Los tiempos de desplazamiento y las distancias de los edificios pueden mejorarse con una mayor planificación urbana y alguna intervención del gobierno estatal o local para asegurar una adecuada disponibilidad del transporte público. Reducir el tráfico promoviendo los desplazamientos a pie y en bicicleta, eliminando los vehículos contaminantes con zonas de acceso limitado, disminuyendo la construcción de carreteras innecesarias y recuperando espacio para los parques públicos, los peatones y los ciclistas.
- Las ciudades sostenibles deben pensar en la reutilización de los espacios y en aprovechar al máximo el espacio disponible. Esto no sólo garantiza la preservación de los espacios naturales, sino que también reduce la necesidad de que los habitantes se desplacen a grandes distancias.
- La orientación es otro factor importante a tener en cuenta. Sacar el máximo provecho de la luz solar, aumentar la luz natural en el edificio, así como aumentar la calefacción natural son medidas que pueden dar grandes resultados si se adoptan en un gran número de edificios.
3. La adopción de fuentes de energía renovables y de alta eficiencia es otro gran paso hacia la sostenibilidad, que pueden dar los edificios existentes. Reducir las cargas de iluminación eligiendo bombillas de bajo consumo; instalar turbinas eólicas, paneles solares (fotovoltaica – FV), sistemas micro hidráulicos, energía geotérmica o biomasa entre otras fuentes de energía renovable, para que un edificio sea más sostenible reduciendo la necesidad de energía.
4. Reducir la refrigeración/calefacción mediante un diseño que tenga en cuenta el clima y medidas de ahorro y eficiencia energética, utilizando equipos y sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado que sean eficientes desde el punto de vista energético.
Se han desarrollado nuevas técnicas para ayudar a un edificio a disminuir el movimiento de calor en su interior, lo que a su vez puede ayudar a enfriar o calentar naturalmente un edificio, utilizando envolturas de edificios de alto rendimiento. La técnica más utilizada es el aislamiento a largo plazo, como el aislamiento térmico, y esto puede aplicarse incluso en edificios existentes.
5. Integrar un diseño paisajístico que proporcione árboles para el verano, plantaciones apropiadas para el viento y espacios exteriores atractivos para que los ocupantes quieran pasar más tiempo al aire libre, reduciendo así la carga de calor adicional provocada por los ocupantes al edificio.
6. Otros recursos, como la gestión de desechos, la retención de agua y la integración de techos verdes, también son fundamentales para contribuir a la sostenibilidad urbana. Por ejemplo, aumentar las superficies impermeables en las ciudades, con una recogida y un drenaje adecuados y más eficientes del agua de lluvia puede tener resultados positivos.
Eficiencia Energética en los edificios más allá de las optimizaciones físicas
Las formas en que consumimos la energía y cómo podemos hacer que nuestro consumo sea más eficiente son muy variadas, y dependen de una gran variedad de factores, como el lugar donde vivimos, el precio de la electricidad y otros servicios, las condiciones sanitarias; entre muchos otros.
Hemos explorado varias formas en que los edificios nuevos y los ya existentes pueden mejorar su consumo de energía utilizando alternativas, así como sacando el máximo provecho de las condiciones naturales y externas. Sin embargo, hay un factor que sigue siendo el más importante: Nosotros.
Ninguna eficiencia energética o planificación urbana sostenible puede ser lo suficientemente óptima si nosotros, como habitantes y ocupantes de edificios, no entendemos la situación, y cómo podemos colaborar mediante la adopción y el desarrollo de hábitos más sostenibles y saludables.
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En este sentido, es más importante que nunca aprender cómo comunicar eficazmente las necesidades del medio ambiente, y cómo podemos reducir nuestro impacto negativo sobre él, de manera que pueda llegar a más personas sin utilizar un discurso intimidatorio, o tratar de transmitir un mensaje por medio de un refuerzo negativo.
Hay una larga lista de hábitos que podemos empezar a desarrollar ahora mismo que, si son adoptados por todos, pueden realmente reducir el uso de la energía, optimizar el consumo de recursos naturales, e incluso generar efectos positivos y duraderos para ayudarnos a alcanzar un mañana más amigable y sostenible.
